Galletas para el Día de la Madre

Gracias al talento y la imaginación de Alison (Ali Bee's) autora de la idea original, he hecho estas bonitas galletas para el Día de la Madre. Van a ser un regalo para mi suegra y conciéndola creo que le van a gustar mucho.

Encontré vía Facebook este magnífico tutorial y no lo dudé un instante, tenía que hacerlas!

La técnica para hacer estos camafeos es la ya famosa RIT (Royal Icing Transfer), de la cual había visto y leído bastante por la red pero todavía no la había probado. Incluso mi “paisana” Paula tiene un buen tutorial acerca de esta técnica en su blog Galletilandia, la visita es de lo más recomendable.

Ha sido un placer decorarlas, me ha parecido sencillo y el resultado es espectacular!
También he de confesar, que me pasó de todo haciendo estas galletas. Problemas que jamás había tenido antes me surgieron en esta hornada. Si me llega a pasar todo esto la 1ª vez, no sé si hacer galletas me gustaría tanto como me gusta!

Galletas Camafeo, decoración paso a paso

Para hacer la masa de estas galletas he usado la receta publicada en la web Karen's Cookies, que también puedes encontrar aquí.

Lo primero que necesitaba eran unas bonitas siluetas. Me gustaron tanto las imagenes que usó Ali, que las busqué en Google, las encontré, las edité en Photoshop y las imprimí.

Después puse papel de horno sobre el folio para ir dibujando las siluetas con glasa blanca. Delinado y relleno, como se hace normalmente en una galleta. Dejé que las siluetas se secaran durante toda la noche, de ese modo se despegan del papel de horno sin ninguna dificultad.

Una vez frías las galletas y como se me expandieron en el horno una barbaridad, con el mismo cortador que usé para cortarlas dibujé sobre ellas otro ovalo para pintar con glasa el marquito del camafeo. El ovalo lo marqué con un rotulador comestible de Americolor, Gourmet Writter.

Teñí una parte de glasa con el colorante blanco de Americolor, porque aunque la glasa sea ya blanca le aporta un tono mucho más brillante y luminoso cuando se seca.

Después puse la glasa blanca alrededor del ovalo que marqué.

Como no tenía cortador ovalado, modelé un cortador que no suelo usar

Una vez seco el exterior de las galletas, las rellené con glasa coloreada. Me decidí por teñir un poco de la glasa en azul y otra parte en tono coral.

El azul lo hice añadiendo a la glasa un poco de Royal Blue de Americolor, que luego tuve que aclarar ligeramente con el colorante blanco (siempre me saca de apuros, lo adoro!) y el tono coral lo conseguí mezclando 3 partes de Deep Pink con 2 partes de Lemon Yellow, ambos colorantes también de Americolor.

Una vez que apliqué la glasa sobre el interior de la galleta, cuando aún estaba algo húmeda pegué el transfer en el centro del ovalo.

Esperé a que se secaran las galletas, hice una línea en blanco alrededor de la zona central, después unos cuantos puntitos de glasa alrededor del color central y arriba, abajo y a los lados pegué unas perlas de azúcar como toque final.

Notas

La verdad es que en esta ocasión se unieron contra mí todos "los elementos"

1. Me encontré con que no tenía suficiente mantequilla para la receta y recurrí a la margarina. En el video de esta receta, Karen dice que a veces mezcla a partes iguales mantequilla y margarina y me atreví a ponerle un poquito de la dichosa margarina para completar. Usé poca, pero usé... craso error!
La masa de las galletas estaba demasiado blandita incluso después de pasar toda la tarde en la nevera y cuando me puse a cortar las galletas era desesperante. No sé como lo hice pero lo conseguí!

2. Antes de ponerme a cortarlas y mientras se enfriaba en el frigo la masa, caí en la cuenta de que no tenía ni un solo cortador ovalado para hacerlas. Cogí un cortador comprado en Lidl, feísimo que jamás pensaba usar porque no sé ni qué representaba... y me puse manos a la obra. Ya tenía mi cortador ovalado!

3. Después, al hornear las galletas me di cuenta que a medida que perdían el frío en el horno se iban expandiendo y perdían su tamaño y forma original. Por favor! ha sido la tanda de galletas más accidentada de mi vida!!!

4. Para colmo, en los tutoriales de transfers que yo había leído, siempre dicen que se pega el transfer con la glasa recién puesta o por lo menos aún humeda. Al poner las siluetas en mis galletas, quedaron perfectas pero a medida que se secaba la glasa de abajo se iban tiñendo “las damas” poco a poco.

Si te animas a hacer estos bonitos camafeos, aprende de mis errores y no los repitas, jajaja

Recuerda

Nada de margarina en la masa, compra un cortador ovalado para cortar las galletas y ten mucha paciencia, no pegues inmediatamente las siluetas en la galleta recién decorada de glasa.

Teniendo en cuenta estos “detallitos” antes relatados, estoy muy satisfecha con el resultado final porque creo que me han quedado aceptables pese a todo!